Mi peor día en el mundo,
no fue el que tú me dabas
el día peor, inmundo
fue el día que no importaba.
Ese día quedé ciego,
inválido, mudo, yerto
sin insultos y sin ruegos
sin estar vivo ni muerto.
Si alguna vez tienes día
cela tu propio sentido,
porque la luz se vacía
en la aurora del olvido.