Por las calles solitarias,
bajo el cielo azul de Africa,
cuánta gente va gritando: ¿Por qué?
Más allá del Adriático hay un mundo triste y huérfano.
Cuánta gente va gritando: ¿Por qué?
Son humanos defendiéndose por vivir en un océano
donde casi non es posible vivir.
Y tú me dices: No sé,
yo no sé ¿por qué siento esta tristeza?
Y cuando estamos haciendo el amor
no se nos va de la cabeza.
Pronto un día llegará
por un cambio natural de la energía.
Y mientras tú y yo, soñándonos los dos, la justicia
nos parece una utopía.
Pero la rabia de los dos puede llegar
a ser amor a la humanidad...
De verdad... de verdad
En la selva amazónica, y en la fría noche ártica
cuánta gente va gritando: ¿Por qué?
Son humanos preguntándose
por qué están viviendo al limite,
mientras gira el mundo sin corazón.
Y tú me dices: ¿Por qué?, yo no sé, tengo tanto frío,
vamos a hacer el amor, pero no,
este mundo no es el mío.
Pronto un día llegará
por un cambio natural de la energía.
Y juntos tú y yo, soñándonos los dos, con un mundo en
perfecta sintonía.
Pero la rabia de los dos puede
llegar hacer amor a la humanidad,
De verdad... De verdad...