Por aqui pasó volando,
una calandria amarilla.
Una calandria amarilla,
por aqui pasó volando.
Por aqui pasó volando,
una calandria amarilla.
Una calandria amarilla,
por aqui pasó volando.
En su piquito llevaba,
una rosa de Castilla.
Que el viento la deshojaba,
como blanca maravilla.
Y en su piquito llevaba,
una rosa de Castilla.
Que el viento la deshojaba,
como blanca maravilla.
Maria Chuchena se fue a bañar,
A orillas del río muy juntito al mar.
Maria Chuchena se estaba bañando,
Y el techador por su casa pasando.
Y le decía: ¡María María!
Ni techo tu casa, ni techo la mía,
Ni techo tu casa, ni techo la mía,
Ni techo la casa de María García.
Este torito que traigo,
lo traigo desde Tepango.
Lo traigo desde Tepango,
este torito que traigo.
Y lo vengo manteniendo,
con cascaritas de mango.
Este torito que traigo,
lo traigo desde Tepango.
Lázalo, ¡Lázalo!
Lázalo que se te va.
Échame en tus brazos mi alma,
si me tienes voluntad.
Lázalo, ¡Lázalo!
Lázalo que se te fue.
Échame en tus brazos mi alma,
y nunca te olvidaré.
Uria, ajajai ¡Y cómo dijo Vargas, túpanle cansados, no te rajes Veracruz! Ajai
Este torito que traigo,
no es pinto ni es colorado.
No es pinto ni es colorado,
este torito que traigo.
Es un torito barroso,
de las llaves acerrado.
Este torito que traigo,
lo traigo desde Alvarado.
Lázalo, ¡Lázalo!
Lázalo que se te va.
Échame en tus brazos mi alma,
si me tienes voluntad.
Lázalo. ¡Lázalo!
Lázalo que se te fue.
Échame en tus brazos mi alma,
y nunca te olvidaré.
¡Óra muchachos,
échenle al zapateado Veracruzano.
Como ustedes saben cansados. Ajai!
Ay! qué bonito es volar,
a las once de la noche.
A las once de la noche,
ay qué bonito es volar, ay! mamá.
Para venir a quedar,
en los tirantes de un coche.
En los tirantes de un coche,
hasta quisiera volar ay! mamá.
Me agarra la bruja y me lleva al cuartel,
me vuelve maceta y me da de comer.
Me agarra la bruja y me lleva a su casa,
me vuelve maceta y me da calabaza.
Y dígame y dígame y dígame usted,
cuantas criaturitas se ha chupado usted.
Ninguna, ninguna, ninguna lo sé,
ando en pretensiones de chuparme a usted.
"Urria, no te rajes Veracruz"
Estaba María Chuchena,
sentadita en la barranca.
Sentadita en la barranca,
estaba María Chuchena.
Estaba María Chuchena,
sentadita en la barranca.
Sentadita en la barranca,
estaba María Chuchena.
Con su vestido en las piernas,
recogiendo flores blancas.
Estaba María Chuchena,
sentadita en la barranca.
Con su vestido en la piernas,
recogiendo flores blancas.
Estaba María Chuchena,
sentadita en la barranca.
María Chuchena se fue a bañar,
a orillas del río muy juntito al mar.
María Chuchena se estaba bañando,
y el techador la estaba mirando.
Y le decía:! Maria, Maria!
Ni techo tu casa ni techo la ajena,
Ni techo tu casa ni techo la ajena,
Ni techo la casa de María Chuchena.
Ay! Ay!